Carreteras de plástico: una segunda vida para miles de desechos

El plástico es un derivado del petróleo al igual que el asfalto. Por ello, la idea de usarlo en las carreteras no aparece como descabellada. La diferencia se encuentra en que los desperdicios provenientes de este material, se acumulan en el mundo porque se usan masivamente como envases de otros productos y, así, podrían concentrarse en un mismo lugar dándoles una nueva utilidad.

El plástico es un derivado del petróleo al igual que el asfalto. Por ello, la idea de usarlo en las carreteras no aparece como descabellada. La diferencia se encuentra en que los desperdicios provenientes de este material, se acumulan en el mundo porque se usan masivamente como envases de otros productos y, así, podrían concentrarse en un mismo lugar dándoles una nueva utilidad.

A principios del año dos mil, se hicieron las primeras pruebas incorporando plásticos reciclados en mezclas de asfalto. India se convirtió en una de las naciones pioneras; pero también se ha puesto en práctica de manera muy acotada en Escocia, Países Bajos, España, Colombia, Estados Unidos y Nepal, entre otros.

En los Países Bajos se experimenta con carreteras de plástico huecas para evitar inundaciones, ya que permiten el almacenaje temporal del agua de lluvia que luego puede ser utilizada en periodos de sequía. Hasta la fecha, en todos los lugares donde se han instalado, se estima que tienen una vida útil tres veces mayor que las tradicionales de asfalto u hormigón.

Si bien, los pavimentos de plástico no conllevan un ahorro por los costos de recolectar y procesar este material, sí se reducen los gastos en un 25 por ciento durante su mantención porque aumenta su durabilidad y resistencia.

¿Por qué otras opciones?

En la producción e instalación del pavimento normal, se generan elevadas emisiones de contaminantes. Además, el asfalto continúa liberando gases nocivos que pueden afectar la salud, sobre todo en días calurosos y soleados.

Por ello, se experimenta con opciones como polvo de caucho de neumáticos usados, mezclas de nanocelulosas, provenientes de residuos madereros y el reciclaje de asfalto. Pero más allá de la reutilización, la industria busca alternativas con criterio de sostenibilidad. De esta manera, se iniciaron las pruebas con plástico reciclado, considerando que actualmente solo el 9 por ciento de estos residuos se recicla.

Los estudios demuestran que los caminos pavimentados con desechos plásticos pueden tener una mayor vida útil y ser más resistentes que las carreteras comunes. Con ese fin, se mezclan con asfalto para ofrecer una superficie más flexible y resistente, lo que reduce costos de mantenimiento a largo plazo.

Sin embargo, aun la investigación es incipiente respecto a medir emisiones durante la producción e instalación de estos pavimentos. Asimismo, queda por evaluar si se liberan microplásticos y cómo se comportan las carreteras cuando venza su vida útil.

Todavía está por verse si el plástico se transforma en una alternativa para hacer frente a millones y millones de toneladas de este material desechadas en el mundo.

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